Semirremolque: el frío al servicio de la eficacia
- 20/09/23
- 6 min
EPISODIO 3 : SERIE SEMIRREMOLQUE – Érase una vez… ¡la historia del frío artificial! Todo comenzó a mediados del siglo XIX, cuando el éxodo rural provocó la desaparición de la cadena corta de suministro y se hizo necesario conservar los productos de una nueva manera. Puesto que resulta esencial garantizar a sus clientes una cadena de frío óptima, descubramos las innovaciones al servicio de la eficacia frigorífica.
Charles Tellier, un ingeniero francés, desarrolla varias técnicas para mantener frescos los alimentos: crea la primera máquina frigorífica con circulación de gas amoniaco licuado y la primera planta mundial de conservación de carne. En 1870, transforma un barco y aísla su bodega, recibiendo el barco el nombre de «El Frigorífico». La travesía del Atlántico fue un éxito: después de 105 días, las 30 toneladas de carne llegaron a Argentina en muy buen estado.
Es el inventor estadounidense Frederick McKinley Jones, cofundador de Thermo King, quien realizará varios años más tarde numerosos avances tecnológicos para mejorar el transporte a larga distancia de los productos perecederos.
Es el comienzo de la cadena de frío… Desde entonces, las normas y la ciencia han seguido avanzando para permitir que nuestros alimentos, principalmente, se conserven de manera óptima durante su viaje hasta llegar a nuestros platos.
El frío: diferentes temperaturas en función de los productos
Se necesitan diversos «fríos» para la correcta conservación de los productos de consumo, según sean éstos frescos (PFT – productos frescos tradicionales), industriales (PFI – productos frescos industriales), o congelados. Todos ellos se rigen por la normativa ATP (Acuerdo sobre Transportes internacionales de mercancías Perecederas), vigente en más de 50 países.
Para cada producto, su propia gestión del frío. Los productos frescos se transportan a una temperatura comprendida entre +2 y +15 grados, según el tipo de alimentos: es el frío positivo. En cuanto a los congelados, la temperatura debe mantenerse entre -18 y -25 grados: es el frío negativo. Como todas las categorías de alimentos son asimismo sensibles al grado de humedad, la higrometría también deberá tenerse en cuenta durante el transporte.
La biotecnología: punta de lanza para la innovación frigorífica
Los productos sanitarios derivados de la biotecnología están cada vez más extendidos; como uno de cada dos medicamentos comercializados es termosensible, los productos derivados de células vivas también han tenido que reforzar su reglamentación, específicamente en lo que respecta a su transporte.
Transporte frigorífico: desglose de un semirremolque refrigerado
El vehículo refrigerado se compone de una caja isoterma, alimentada a su vez por un equipo frigorífico.
La carrocería suele estar aislada con poliestireno expandido y revestida de materiales aislantes: paneles lisos de poliéster o metálicos.
¿Lo sabía? Como el vacío es el mejor aislante, hay cada vez más innovaciones en las cajas de dobles paredes, aisladas mediante vacío. «Solo estamos al principio del aislamiento por vacío; los vehículos equipados con esta solución son prototipos. En cambio, esta solución tiene un gran futuro», afirma Rémi Paing, consultor de Fraikin.
Existen varios tipos de cajas: de doble piso, de una sola temperatura o multitemperatura (unos tabiques segmentan la caja y permiten gestionar varias temperaturas). Algunas cajas también se destinan al transporte de carne o de flores y requieren distribuciones específicas.
Históricamente, el equipo de frío consta de un compresor, un evaporador y un condensador. El equipo produce frío habitualmente gracias a un motor diésel; en los camiones portantes, puede ser accionado por el motor del vehículo. Puesto que este combustible consume energía fósil y genera ruido, es necesario asegurarse de que la tecnología empleada esté en línea con las nuevas tendencias.
Semirremolques: las alternativas para un equipo de frío más ecológico
GNC, GNL o biodiésel, electricidad… las nuevas energías están sustituyendo poco a poco los motores tradicionales de los vehículos. Una de ellas, el GNC, o gas natural comprimido, está cada vez más extendida. De hecho, Fraikin ha ayudado a Fresh&Loc, el especialista logístico del grupo Globe Express, con el suministro de una flota de siete vehículos frigoríficos que funcionan con GNC.
Un equipo de frío alimentado con hidrógeno: la solución del futuro
Varios carroceros y fabricantes están haciendo pruebas con la alimentación de hidrógeno, que se transforma en electricidad mediante una pila de combustible. Una tecnología verde (si el hidrógeno tiene un origen bajo en carbono) y silenciosa que garantiza ¡dos días de autonomía en largo recorrido y un repostaje en diez minutos!
La criogenia: una alternativa prometedora
El equipo de frío utiliza nitrógeno líquido a -196 °C, que pasa por un intercambiador de calor y enfría el compartimento de carga dos veces más rápido que un equipo de frío diésel, ¡a la vez que reduce la huella de carbono en un 80 %!
Gracias a sus colaboraciones con Chéreau y Air Liquide, Fraikin ha podido desplegar la tecnología criogénica para aplicarla a los semirremolques. A petición del grupo U, los expertos de Fraikin participaron en el desarrollo de esta tecnología. Efectivamente, U Logistique quería alquilar cabezas tractoras alimentadas con GNV y semirremolques equipados con una unidad de frío que funcionase con nitrógeno líquido, a fin de iniciar un auténtico proceso de desarrollo sostenible.
La cortina de aire para conservar la temperatura
Para mantener el frío de la caja durante la apertura de las puertas, se instala un innovador sistema de cortina de aire en la parte trasera del semirremolque.
«Antes colocábamos lamas de plástico para evitar la pérdida de temperatura cuando se abrían las puertas del semirremolque», explica Olivier Dutrech, Director de innovación de Fraikin.
A partir de ahora, «la cortina de aire toma el aire ambiente del interior de la caja o del exterior (según los fabricantes) y lo impulsa a gran velocidad y con poca anchura hacia el suelo. Eso crea una lámina de aire», añade Rémi Paing.
La etiqueta PIEK: garantía de silencio para unas entregas refrigeradas y discretas
«Trabajamos para reducir la huella sonora del vehículo en su conjunto. En el caso de un semirremolque frigorífico, esto significa un equipo de frío con bajas emisiones sonoras, materiales absorbentes en el interior del semirremolque y una plataforma trasera con un revestimiento específico para minimizar el ruido», añade Olivier Dutrech.
Además de velar por el respeto del medio ambiente emitiendo la menor cantidad posible de CO2, las tecnologías innovadoras lo son también en cuanto a la contaminación acústica. Cada vez son más las ciudades que exigen a los transportistas que realicen sus entregas en determinadas franjas horarias, sobre todo por la noche, a fin de no molestar a los vecinos y para hacer el tráfico más fluido durante el día.
Para cumplir con esta restricción, la certificación PIEK, reconocida en el proceso Certibruit, garantiza que los vehículos que realizan entregas entre las 23:00 y las 7:00 no superan los 60 decibelios.
Las normativas, ya procedan de medidas medioambientales o sean para garantizar nuestra salud, están empujando a la industria a reinventarse hacia una innovación continua de la refrigeración. Ya sea en la caja o en el tipo de motor del equipo de frío, hay muchas áreas de mejora para garantizar una cadena de frío óptima a todos los actores del sector, así como el pleno cumplimiento de la legislación